¿Qué es una póliza de salud y qué cobertura proporciona? ¿Cuáles son los costes y qué elementos hay que tener en cuenta para elegir un seguro adecuado para nosotros? Aquí tienes 10 consejos para evaluar mejor y encontrar el que más se adapte a nuestras necesidades.
Una póliza de salud es un seguro que te protege en caso de problemas de salud que resuelves contactando con la sanidad privada , por elección u obligación. Poco difundido hasta hace unas décadas, ahora cada vez más personas lo estipulan, principalmente por las deficiencias de la salud pública.
La oferta de pólizas de salud en el mercado es realmente inmensa, hasta el punto de que orientarse y elegir la adecuada no es nada fácil. Para ello, hemos decidido enumerar aquí 10 consejos útiles para hacerlo.
1- Descubre los diferentes tipos de seguro médico
Lo primero que debes saber es que existen diferentes tipos de pólizas de salud, cada una adecuada para cubrir determinadas necesidades:
- Póliza de salud clásica : es un seguro que te ayuda en caso de enfermedad o lesión, cubriendo pruebas de diagnóstico, tratamientos, ingresos hospitalarios y la compra de medicamentos relacionados.
- Póliza de accidentes : en este caso, solo se cubrirán los gastos relacionados con el diagnóstico y tratamiento en caso de accidente.
- Póliza de asistencia domiciliaria : seguro que paga los gastos de asistencia domiciliaria que necesita si, por ejemplo, ha tenido un accidente o se ha enfermado.
- Póliza de discapacidad permanente : este seguro lo protege pagando una compensación si sufre una discapacidad no temporal.
- Póliza dental : la mayoría de las pólizas tradicionales no contemplan el pago de la atención dental. Es por ello que algunas empresas ofrecen seguros específicos para gastos relacionados con la salud bucal.
- Seguro médico de viaje : una póliza por tiempo limitado que te cubre cuando estás en el extranjero.
2- Ten en cuenta tu trabajo y tu estilo de vida
Como seguramente habrá entendido al leer la lista anterior, elegir la póliza adecuada para usted tiene mucho que ver con su trabajo, sus hábitos y su estilo de vida. Si la póliza de tipo más “clásica” se adapta a más o menos a todos, los otros casos se refieren a necesidades más específicas.
Por ejemplo, si vive solo, lejos de su familia o si usted y su pareja trabajan, una política de atención domiciliaria, especialmente a medida que envejece, puede ser para usted. Si, por el contrario, la ocurrencia que más te preocupa es la de un accidente, quizás porque realizas un trabajo riesgoso, practicas deportes en los que te puedes lastimar fácilmente o incluso simplemente pasas mucho tiempo conduciendo, la póliza de accidentes. es el que es para ti.
3- Elige una póliza adecuada a tu edad
Las compañías de seguros siempre imponen límites de edad para contratar sus pólizas de salud. Si tiene más de 55 años, por lo tanto, deberá verificar cuidadosamente la edad máxima proporcionada por el seguro que ha elegido.
Afortunadamente, en los últimos años han surgido muchas pólizas de seguros para personas mayores, y no es extraño encontrar una póliza para jubilados, o en todo caso para mayores de 65 años, en el catálogo de todas las grandes aseguradoras. Estos seguros proporcionan, además del reembolso en caso de exámenes y hospitalización, también asistencia domiciliaria durante la convalecencia.
4- Considere servicios adicionales
En algunos casos, una póliza puede ofrecer más que solo cobertura para los costos de atención, pero también puede brindarle otros servicios. Un ejemplo es la cobertura legal en caso de daños sufridos por un tratamiento médico inadecuado o negligente. Pregúntese cuáles puede necesitar y cuáles no.
5- No olvides que una póliza sanitaria no cubre todo
Sin embargo, no olvide que incluso la póliza más amplia no cubrirá todos sus gastos relacionados con la salud . De hecho, las pólizas generalmente no cubren:
- Gastos por el tratamiento de problemas médicos preexistentes en el momento de la estipulación.
- Los debidos al abuso de alcohol, drogas y psicofármacos, incluso en caso de accidentes provocados por estas sustancias.
- Gastos dentales, a menos que se especifique lo contrario.
- Gastos por intervenciones estéticas.
- Los de dietas y consejos nutricionales.
- Anticonceptivos y abortos voluntarios.
6- La prima es variable y depende de muchos factores
La prima de una póliza de seguro médico puede variar mucho según quién la solicite. Esto sucede debido a que se calcula en base a varios factores, que tienen que ver con tu edad, tu estilo de vida, el trabajo que realizas, tu estado de salud, etc. Por estos motivos, por tanto, cada contratista recibirá un presupuesto diferente y personalizado.
7- Hable con su médico antes de estipular
Al contratar un seguro médico, deberá proporcionar mucha información sobre su estado de salud. Es importante que seas absolutamente honesto y veraz con los datos que reportes, ya que si brindas información incorrecta, la empresa podría rescindir tu póliza, o en cualquier caso podrían surgir problemas, quizás en el momento de necesidad.
8- Presta atención al techo
Todas las políticas de salud tienen un techo y, obviamente, cuanto más alto es, más caras son. Pero, ¿qué altura debe tener este techo? En caso de accidente o enfermedad grave, los costes sanitarios pueden subir muy rápidamente, especialmente en el caso de hospitalizaciones prolongadas, operaciones quirúrgicas, necesidad de utilizar maquinaria especial, etc. Un límite máximo de algunas decenas de miles de euros puede no ser suficiente.
9- Cuidado con los gastos pagados por adelantado
Algunas aseguradoras planean anticipar el gasto debido a las instalaciones de salud, que luego es reembolsado por las empresas. No hace falta decir que esta fórmula puede predecir que se verá obligado a desembolsar una gran suma de dinero por adelantado, solo para que se lo devuelvan más tarde. Pregúntese si puede permitirse ese gasto.
10- Un factor importante: la asistencia
El servicio de asistencia de tu seguro debe ser eficiente y siempre accesible , para darte la serenidad que necesitas e intervenir con prontitud en situaciones de emergencia. Mejor asegúrate de que el servicio que ofrece tu empresa esté a la altura de tus necesidades y sepa guiarte en los momentos más delicados.